Claves para operar un negocio exitoso
Antes de empezar mi propio negocio, trabajé en el mundo corporativo durante 15 años. Tuve muchos jefes, adquirí conocimientos en diferentes campos y aprendí lo que funciona para operar un negocio con éxito.
Dos de las empresas para las que trabajé quebraron. Mirando hacia atrás, ahora comprendo por qué estas empresas fracasaron. Había una mala gestión, ningún control de calidad, falta de incentivos para los empleados, poca moral y mini-dictadores en todos los departamentos. La conclusión es que a la alta dirección no le importaba.
Antes de iniciar un negocio, es importante averiguar si tiene las cualidades necesarias para dirigir su propia empresa. Hay muchas formas de convertirse en propietario de un negocio, entre ellas:
a) Empezar un negocio desde cero
b) Comprar un negocio existente
c) Adquirir un sistema de franquicias
Cada una de las opciones mencionadas tiene sus ventajas e inconvenientes. Sin embargo, todas tienen algo en común: usted tiene el poder de controlar su propio destino. Una empresa vive o muere por las decisiones de sus propietarios.
Debe hacerse estas preguntas antes de iniciar cualquier tipo de negocio:
1) ¿Tengo una buena capacidad de atención al cliente?
2) ¿Puede relacionarse con los empleados de forma positiva?
3) ¿Es usted lo suficientemente decisivo para tomar decisiones importantes?
4) ¿Puede delegar sin microgestionar?
5) ¿Es usted organizado?
6) ¿Tengo la persistencia necesaria para construir una marca duradera?
7) ¿Cuál es mi visión de la empresa?
Un negocio de éxito tarda en construirse. Hay que hacer crecer el negocio de manera que no se descontrole. Hay que formar a los empleados antes de abrir el negocio. Asegúrese de que dispone de suficiente capital inicial para cubrir todos los gastos durante la fase de puesta en marcha. Debe haber un sistema de retroalimentación para recibir los comentarios de los clientes.
Dirigir tu propio negocio es una experiencia emocionante y gratificante. Para tener éxito, hay que seguir un plan bien pensado y tener la persistencia necesaria para llevarlo a cabo.