No te rindas. Repito, no te rindas.
Empresarios: ¡no se rindan! No se rinda. Repito, no se rindan.
Empresarios, escuchad. Las cosas serán un reto, el camino por delante es largo y frío. Habrá sorpresas inesperadas tanto para lo bueno como para lo malo. Hagas lo que hagas, no renuncies a tu deseo de triunfar.
La mayoría de las veces los problemas más difíciles de superar tienen que ver con el dinero. «Todo es cuestión de benjamines», como se dice. Otras cuestiones no monetarias suelen tener solución; algunas soluciones son más complejas que otras, pero se puede encontrar la solución técnica. Es con los problemas relacionados con el dinero con los que los empresarios tienden a abandonar su lucha por el éxito.
No rendirse es muy difícil, pero sólo los que se esfuerzan por salir adelante pueden presumir de sus éxitos como empresarios.
Esto es lo que hay que dominar para capear el temporal:
1. Mantener la coherencia – Los empresarios tienen tendencia a cambiar completamente las cosas si no obtienen un buen resultado a la primera. Este no es el mejor enfoque para resolver cualquier problema. Mantén la constancia, realiza pequeños ajustes en el enfoque y controla el progreso.
2. Desarrollar una rutina – Casi todos los multimillonarios de éxito que se han hecho a sí mismos son conocidos por su comportamiento predecible. Warren Buffett tiene la rutina de comer en el mismo restaurante; Donald Trump tiene la misma rutina matutina. Los propietarios de pequeñas empresas regionales de éxito siempre hablan de su enfoque diario favorito. Desarrolle el suyo propio y cúmplalo.
3. No actúes de forma impulsiva: para mí esto es lo más difícil de hacer. Tiendo a entusiasmarme con una nueva idea y rara vez me detengo a evaluar los dos lados. Un buen emprendedor tiene la suficiente autodisciplina para detenerse y tomar una decisión basada en un análisis de la situación.
4. Mantenga la calma y continúe: las cosas van a golpear el ventilador. Con frecuencia. El mundo del empresario suele describirse como un estado de caos semicontrolado. No te detengas ni te pongas nervioso, porque eso no le sirve a nadie.
5. Cree en ti mismo – Alguien dudará de ti a cada paso del camino. A veces incluso tú pensarás que es imposible lograr lo que te propones. No te rindas, cree en ti mismo.